Jerarquía eclesiástica

La sacra Jerarquía.—

El Señor, que con tan admirable orden dispuso las cosas de la creación, subordinándolas unas a otras, y en la sociedad el orden de la autoridad no quiso dejar a su Iglesia desprovista de este orden, y estableció en ella la sacra Jerarquía la cual es como vamos a decir. El ápice de este Orden es el episcopado: que es la plenitud del sacerdocio y puede todo lo que puede el presbítero; además el Obispo es el ministro necesario para ordenar y el ministro ordinario de la Confirmación. Próximo al episcopado esta el presbiterado; presbítero, en su etimología, significa anciano; en el uso, a los presbíteros se les llamaba y llama sacerdotes, si bien hasta el siglo x también los Obispos se llamaban muchas veces sacerdotes y los presbíteros sacerdotes de segundo orden, sacerdotes de orden inferior, segundos sacerdotes; tienen el poder de consagrar y de absolver y de dar la Extremaunción; y son ministros ordinarios del Bautismo y extraordinarios (a veces) de la Confirmación. Diacono, en su etimología significa ministro, servidor, cooperador; mas en la jerarquía se ha circunscrito este nombre para significar los ayudantes de los Obispos y de los presbíteros en los oficios sagrados; es propio de ellos servir en el altar, bautizar, dar la Comunión a falta de otros, con permiso, y leer los Evangelios. Subdiacono es el que esta debajo o a las ordenes del diacono y suele servirle las cosas del altar y lee las Epístolas en la Misa. Vienen después las Ordenes menores: acólitos, exorcistas, lectores, ostiarios. De estos, los acólitos sigue al subdiácono o, cuando no le hay, al diacono o presbítero para; servirle, alumbrarle, responderle, llevar las velas, etc.; los exorcistas tienen oficio de echar los demonios, de decir a los que no comulgan que dejen sitio a los que comulgan y de llenar las pilas bautismales; los lectores tienen oficio de leer en la iglesia, si bien la lectura del Evangelio ya se ha reservado a los diáconos, y de bendecir, pan y frutos; los ostiarios o porteros tienen el oficio de guardar las puertas, tocar las campanas, abrir el sagrario y el libro al que predica. Tonsura: viene antes que todas estas ordenes la tonsura, que es un rito por el cual se le cortan los cabellos al que quiere ser clérigo y se le abre la corona. Con esto queda ya hecho clérigo, aunque no tiene todavía Orden ninguna. Tal es la sacra Jerarquía, desde los tonsurados a los Obispos, por su orden.

Qué ordenes son Sacramento.—

De estas Ordenes no todas son Sacramento. Es Sacramento, seguramente, el presbiterado y también el diaconado. Acerca de la ordenación episcopal hubo mucha controversia, y algunos afirman y otros niegan que sea Sacramento; mas no se dude que lo es. El subdiaconado no es Sacramento. Y mucho menos las Ordenes menores; solo son ritos de la Iglesia por los cuales son elegidos y dedicados al servicio del  altar los ordenados, sin que en ellos se reciba la gracia ex opere operato. La tonsura menor ni siquiera es Orden. En cuanto a  los oficios antes reservados a los ordenados menores, hoy la mayor parte son permitidos a los laicos y ejercitados por ellos, excepto el exorcismo, que esta reservado a los sacerdotes, y las bendiciones.

Institución del Sacramento del Orden—

Este Sacramento tuvo que ser instituido por Jesucristo mismo. Y se puede preguntar cuando lo instituyo. Lo instituyo parte en la Cena, cuando dio a los Apóstoles facultad de hacer lo que El había hecho, es decir, consagrar y ofrecer sacrificio. “Cuando hiciereis esto, lo haréis para acordaros de Mi.* (1 Cor.; 11, 24.) Parte lo hizo después de la resurrección, cuando les confirió la facultad de perdonar los pecados y los hizo pastores o rectores de la Iglesia. Y seguramente que les dio muchas instrucciones en aquellos días hasta su ascensión, cuando, como dice el Evangelio, se les mostró muchas veces vivo y les hablaba del reino de Dios. Cristo no ordeno separadamente ministros de las diversas ordenes, sino Obispos que contienen todos los demás grados.

Puntos de catecismo, Vilariño, S.J.